Llega un momento en el que te sientes completamente solo, desahuciado para el mundo, muerto para la vida, sepultado dentro de ti. Pareciera ser que llevaras una herida que no sana, una lesión incurable: depresión para unos, ansiedad para otros. En algunos casos es esa marcada dependencia emocional, esa compulsión a repetir historias, a amar […]
Este contenido solo está disponible para miembros.