25. Sexualidad y Espiritualidad

“La vida sexual de los esposos no puede ser como un paréntesis en su vida espiritual, sino al contrario: su corazón y su centro”.

Hablar de sexualidad y espiritualidad es hablar de dos de las áreas más importantes a tener en cuenta en la construcción de nuestro proyecto de vida en pareja. Éstas, abarcan nuestra condición humana en una triple visión: Unidad de alma, cuerpo y espíritu; así, la relación de pareja se hace un encuentro que vincula y une, donde se ensamblan el placer y la sexualidad como un lenguaje de amor único y sagrado al servicio del amor. Un lenguaje de amor diseñado por Dios para nuestro disfrute.

Se hace entonces necesario cuestionarnos sobre el cómo hemos vivido nuestra sexualidad y a partir de allí, resignificarla como un placer que nos permita expresarnos, disfrutarnos, deleitarnos, en una dimensión sagrada y exclusiva que lleva a un acto de amor pleno que se hace entrega y donación mutua.